domingo, 25 de marzo de 2012

Somos animales

 
Hesse reposa en mi mesilla de noche desde hace meses. Sin prisa. Ganitas le tengo, pero tendrá que esperar, como Huxley y Kundera. ¡Qué va a ser lo mismo a los dieciséis que a los treinta y ocho! ni seguramente hubiese sido igual a los treinta y cinco, sin irme tan lejos. Tengo tiempo de sobra para observarlo todo atentamente, y corroboro que el pensamiento vuela libre desde siempre, pero las acciones pueden verse limitadas dependiendo de lo que escojamos. Yo escojo la libertad.

Si dos almas tocadas -pese a carecer de sentimientos entre ellas- amarran sus manos con absoluta, total, completa, plena y rebosante sinceridad... un camino de apoyo y confianza se amplía y purifica todo a su paso: AMISTAD.

La primavera llegó este año bullendo por todos lados; por la mente, por el cuerpo, por el pecho, por las manos, por el estómago... Me encantó su venida calurosa, tierna, sensual. Se deshizo un enorme nudo que interfería y bloqueaba cosas buenas y, a la vez, rompí varias veces las normas de la amistad (que, por cierto, no existen :)). O sea... no rompí nada.

Esta noche pasada dormí con una sensación muy placentera de plenitud y tranquilidad. Al despertar necesité solo un par de minutos para encontrar la frase justa que resume a la perfección mi sentir de hoy domingo. El primer domingo de primavera. Es de Hesse:
"Sin el animal que habita dentro de nosotros, somos ángeles castrados"
(El lobo estepario)
Amo a mis amigos de la manera que explican las cinco primeras acepciones del diccionario. Individual o mezcladamente. Soy amable porque se me ama fácilmente. Así de simple. Soy achuchable, molestable y querible. Aborrecible, detestable, cansina, insistente. También adorable y besable. Como todas las personas. Y sigo siempre mis instintos. Como los animales.

jueves, 8 de marzo de 2012

Deseo


Hoy desperté deseando. Qué sensación tan bonita. No con un deseo focalizado hacia una cara concreta -aunque puede que sí haya influido cierta mirada-, sino más bien un runrun dentro que mueve energías  y ensalza mi "algo".

Hoy me levanté sensual, tanto que no tuve ningún miedo ni tapujo en lanzarlo al universo. Miedo; palabra que hay que descartar siempre, en todas las circunstancias. Me miré pues y me gustó lo que vi, lo que noté. Me deseé incluso.

Deseo, y con formas distintas. Deseo de leer más cosas, de aprender, de conocer, de seguir avanzando, de viajar más veces, de caminar. De seguir siendo libre de esta manera. Ganas. De unas manos, de unos ojos, de una sonrisa. De discusiones chorras y piques dialécticos, de confianza.

Alegría de sentirme así, de ser así, por mucho que la gente no entienda cómo.... Contenta de ver que todas las personas somos totalmente reaprovechables. De tener paciencia... y certeza.

De unos ojos azules, que otro día pueden ser color miel. De ojos bonitos en cualquier caso.