lunes, 15 de junio de 2009

Magia




La una del mediodía de un domingo calurosísimo no es la hora habitual para estar donde estuve hoy.

La gente a esas horas toma la cervecita, las papas, las olivas rellenas, o el sol directamente. Duerme... todavía. O lee el dominical, qué sé yo.

Yo estaba asistiendo a un espectáculo de escapismo, con trucos de Houdini, que regresó en el tiempo con una máquina para hacernos sentir como en esos años en que vivió, cuando había tan pocas cosas descubiertas y, sin embargo, las que había eran todo para mucha gente.

En uno de los momentos del espectáculo dijo que nunca perdiéramos la ilusión ni la capacidad de asombro. Es algo muy oído, pero me llegó más por ver la cara que estaba poniendo mi hijo todo el rato, y pensé que, aunque es posible seguir teniendo, me parece imposible conservarla con las características vírgenes que se tienen a esa tierna edad.

Luego recordé -quizás por el tremendo calor-, que ya se acerca la Noche de San Juan, de especial repercusión para los que vivimos en zona de mar. Me vino a la memoria una de la quincena de noches mágicas vividas cuando creía en más cosas de las que creo ahora (sí, soy una descreída, lo sé, se siente :P), y cómo nos enfilamos un grupo de pelirrojas con la única luz de la luna en busca de alcachofas bordes para hacer un conjuro que acababa de relatar con esa voz tan chula Amàlia Garrigós (antes de malmeterse en camisa de once varas). ¡Qué risas!, y qué tembleque da pensar que muchos de nuestros deseos llegaron a cumplirse... quizás a causa de ese conjuro, quién sabe (buuu).

Es un disfrute escuchar la radio esas noches -bueno, ahora corroboro que todas las noches puede serlo- en que se habla de magia, y, entre músicas medievales, se van contando leyendas mientras los escuchantes aportan curiosidades, enriqueciendo el folklore ya de por sí tan llenito de cosas interesantes.

La RAE define magia como: "Arte o ciencia oculta con que se pretende producir, valiéndose de ciertos actos o palabras, o con la intervención de seres imaginables, resultados contrarios a las leyes naturales"

Pero también como: "Encanto, hechizo o atractivo de alguien o algo"

Bien, yo he visto magia en corros de gente de distintas edades sentados en tertulias en noches de verano, y en amigos cantando a pleno pulmón mientras bajábamos con los vespinos de las fiestas del pueblo de turno hacia la playa. Es horrible esa sensación del vaquero mojado, y no digamos si lo acompaña arena mojada y pelo arenoso, pero es una sensación mágica. Y también esa otra en la que el bar se va vaciando, la música va bajando de volumen, y no notas nada de eso, sentada en una mesa debatiendo discusiones de besugos. O la del morreo improvisado de alguien que en principio no debería dártelo...

¿Podéis verla vosotros?

3 comentarios:

  1. Por mi parte veo la magia en esos momentos en los que el silencio no se hace incómodo, en los que es suficiente con estar con la persona que quieres aunque no digas nada, veo la magia en la mirada de mi sobrino, veo la magia en las risas con mis amigos, veo la magia en las cenas en familia, veo la magia cuándo leyendo algún blog se me dibuja una sonrisa... últimamente veo mucha magia...y me gusta.
    Biquiños guapiña!!!

    ResponderEliminar
  2. Yo veo magia en los viajes en tren, con los paisajes y la posición del sol cambiando rápidamente mientras notas, en un lado de la cara, el calor, y en el otro lado, la señora que te da conversación. También veo magia en el viento que vuelve loco a mis pelos, y en cualquier cosa que hace Miniyó (¿has visto el último video de Ant?)

    Besos!

    ResponderEliminar
  3. Gracias a las dos por vuestras aportaciones.

    Cris: he tardado, pero lo he visto y escuchado(en el curro no tengo sonido);)

    ResponderEliminar

¿Te apetece aportar algo?