viernes, 13 de febrero de 2009

Aquellas sensaciones...



Mi profesión es agradecida. Aunque tuve que tocar mil palos antes de asentarme, el fin justifica los medios, que dijo Maquiavelo.

Pasar algunas jornadas laborales en medio de la Naturaleza, rodeada de águilas culebreras, nenúfares, pollas de agua, garzas, ... es una auténtica gozada.

Sentir el aire puro en mi cara, el sol... y que el único sonido que llegue a mis oídos sea el del rumor de los juncos agitándose mecidos por el viento... ¿se puede pedir algo más?

Y conocer que las anguilas tienen una vida asombrosamente interesante, pese a lo que me repugna verlas y más comerlas (y eso que las probé para saber a qué sabían). Y saber que nacen en el Mar de los Sargazos, algunas llegan donde yo vivo, y después de un crecimiento por etapas y por lugares, vuelven a morir al sitio de donde vinieron (¡qué tías!).

Y que el espinoso tiene una actividad sexual tan frenética que para sí quisiera Nacho Vidal. Y que asume el rol de cuidar su nido y a sus hijos siendo macho, hecho aún extraño para los humanos en las sociedades "desarrolladas".

Ahí tenemos el Medio Ambiente, tranquilito, sin molestar a nadie, dejando pasar los acontecimientos, cumpliendo con su papel en el ciclo vital.

Y podemos aprender tanto, al tiempo que lo disfrutamos...

Que las libélulas nos sigan indicando que el aire es puro y lo podemos respirar sin problemas, y que el samaruc nos diga -simplemente estando-, que el agua está limpia. Que ellos sean como pequeños chivatos que nos adviertan del problema antes de que llegue.

"Nunca podrás proteger aquello que no amas; ni amar aquello que no conoces"

12 comentarios:

  1. Guau, ¿en qué trabajas? Yo también quiero...

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  2. No te lo vas a creer!! había respondido y el mensaje no ha podido publicarse :blink:

    Digamos que, aparte de tratar de mantener actualizadas dos webs de temas turísticos y una ventana interactiva (tocateclas profesional, vaya), atiendo "pacientes" deseosos de conocer más el lugar en el que vivo. Y como vivo rodeada de naturaleza... pues eso.

    (Espero haber sido lo más críptica posible, que una quiere ser un poco misteriosa :ninja:)

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  3. Què bonic aquest post. Transmets pau. Com la natura. Estic segur que cadascú/cadascuna de nosaltres des del nostre petit racó podem fer alguna cosa per protegir-la. Ets afortunada de viure en un lloc tan bonic. Besets.

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  4. Que chulo Majo, que suerte poder tener ese contacto con la naturaleza. Ojalá tod@s supiésemos apreciarla y respetarla como se merece. Ojalá tod@s tomásemos conciencia de ese equilibrio del que ella y nosotr@s formamos parte.
    Besos.

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  5. benjet: tenim una visita pendent... Gracietes per les teues paraules ;)

    Rosa: pienso que el contacto con la naturaleza lo podemos tener en cualquier momento, siempre que la "veamos" y la miremos. Puedes entretenerte un rato mirando un árbol sin necesidad de salir de la ciudad, y también eso enriquece... aunque, pensándolo bien, tú la tienes también a tu alrededor!! ;)

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  6. Estoy de acuerdo en lo que dices de la película "Sentido y sensibilidad". La he visto hace mucho tiempo, y es de las que repito siempre que tengo oportunidad. ,D
    Cuando decía lo de "Orgullo y Perjuicio" me refería a una de las películas que me han gustado de las que he visto recientemente.
    Gracias por tu visita.

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  7. Sí Majo, yo tengo la maravilla del mar. Es una gozada, aunque en verano se ponga esto imposible, el resto del año da gusto vivir aqui.
    Besitos.

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  8. Es interesante eso de saber qué es lo que debiera haber; como eso que cuentas de que las libélulas indican que el aire está puro. Aunque… ¿y si las libélulas aprenden a respirar tan tóxico como nosotros? :O :O Claro que las libélulas, al menos por la poética que tengo vista, son siempre viajeras, como olas, que no se quedan donde no las quieren o no pueden vivir… ¿Será así? Y, volviendo a lo mismo… ¿y si se acostumbran?, ¿cuánto tardarías en darte cuenta?

    La canción, una de ella, sobre las libélulas, decía: “las libélulas vuelan al destierro”. Es de Amaral, no recuerdo el título; pero era, ¡andá, es verdad!, sobre la contaminación… ¿y algo más? No recuerdo. Sólo eso de “y el río grita: asesinos… Me avergüenza lo que habéis hecho conmigo”. Es hermosa esa canción…. El comienzo era: “anoche soñé que mi padre estaba vivo”.
    Pollas de agua; sabiendo que yo te leo, ¡esto es una provocación, Majo! :) :) :)

    En el colegio había un calendario con aves, y allí estaba “¡la polla de agua!”, para distracción colectiva.

    Es curioso, todo; pensaba en lo que decían de mí que resultó ser cierto y en lo triste que es vivir así, sin nadie que te explicara que aparte de los libros y estudiar, trabajar, estudiar, estudiar, hay otras cosas más importantes. O cuanto menos que no estarás sola; o que estar sola, a veces, es como único y mejor podrás estar.

    “Me avergüenza…” la “educación” recibida. ¿Será que uno suelta la cabeza porque sabe, en el fondo sabe, que este mundo apesta y no habrá quien lo cambie? Como mucho que no nos manche ni hiera a mas nadie, pero cambiar, cambiar,… ¿ quién te dice que el cambio que traes es mejor que el mal que te llevas?

    No sé; es totalmente extraño esta felicidad desnudita y mojada tanto aquí como al lado durmiendo :) :), y, en cambio, esa sensación constante de “vámonos, aquí nos harán daño”. Y digo que es extraño porque, hablándolo, me doy cuenta de que, bueno, es injusto, porque también hay gente buena, pero… ¿y si querer es eso? Gloria Fuerte decía: “a mí la gente no me gusta; yo a la gente la quiero demasiado”. Y, bueno, es a la misma reflexión que llegué con Markos, pero hablando sobre las olas; te vas del mar, te vas de la playa, y purificas el lugar del que vas, el lugar al que vienes y el recuerdo que dejas; te quedas, y… no sé. No sé porque considero que todo tiene su mérito… pero es entonces cuando me desconcierta esta sensación, aún estando feliz, de este mundo no me gusta, este mundo me asusta.

    En fin. “Aquellas sensaciones”, tres puntos suspensivos, y no podría estar más de acuerdo.

    Abrazos post y bresos pre :) :) :)

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  9. Aaayyy! Majo. Estaba yo leyendo tu entrada y sintiendome bien. Pensaba, mientras leía, que qué idílico, letras, pensamientos, naturaleza. Qué orden. Qué bien me siento. Me has transportado.

    Pero claro, todo no dura. Al ir a poner mi comentario leo los que preceden. Entonces ocurre. Leo el de AntWaters, y ha sido automático. Me he sentido identificada. No me gusta este mundo. En general. Sí por partes. Por ejemplo esas partes que tú mencionas. Así como lo haces...hhhhmmmmmm. Pero todo, es demasiado. Mejor me pongo otra copa de vino.

    A tu salud, Majo. Me haces disfrutar.

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  10. Gracias por este regalo, porque precisamente vengo de pasar el finde en un entorno como el que describes y a la misma vez que vengo muy relajado, también me deja tocado y cuestionándome el orden de las cosas. Leerte me ha servido para no sentirme tan solo en mis planteamientos.

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  11. A Ayla: no me des las graciasssss!!

    Rosa: sin mar cerca no creo que pudiera vivir. Es algo muy oído y leído, pero para mí así es.

    Ant: tus comentarios son dignos de estar siempre en la puerta de entrada, no en la retaguardia, donde quizás no lleguen a todo el mundo. No sé qué decirte, ¿quizás que tanta sensibilidad puede hacerte sufrir así? Me haces repensar...

    Estoliana: brindemos pues, hace mucho que no pillo el puntito con el vino, y de vez en cuando hace falta.

    Sâddha: claro que no estamos solos! (eso espero, glups)

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  12. No soy experto en vino, pero no por eso dejo de disfrutarlo. Sé que esta entrada, "natural" como su autora, es como el vino.

    Según vaya pasando el tiempo, en sucesivas lecturas, mejor será su poso.
    A mí me sonaba Van Morrison con su "Brown Eyed Girl" dentro de la cabeza conforme iba leyendo.

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