jueves, 2 de abril de 2009

Like teen Spirit




No es la primera vez que me reafirmo en mi pasión por los Estados Unidos y su historia, denostada por muchos europeos viejos por su... ¿"contemporaneidad"? No sé, algo no deja de ser interesante por ser relativamente nuevo, y tanto me vale hablar con una persona joven como con una anciana, siempre que tengan algo que decirme.

Y a mí todo lo que a ese país incumbe tiene que decirme, y mucho. No entraré en valoraciones históricas ni en el relato de los hechos -para eso está la Wiki-; sólo trataré de plasmar en pocas líneas (espero), mis sensaciones, que, aún habiéndolas enumerado una y mil veces, nunca me canso de evocar.

Cierro los ojos, por ejemplo, me retrotraigo decenas de décadas atrás, y estoy tumbada en una pradera; por más que miro y miro, nunca acaba, nunca... Y entonces siento esa pureza, esa fresca calidez, ese cosquilleo de que algo nuevo está a punto de empezar. Con sus erratas -como todo-, con sus logros, con sus pasos, zancadas y saltos...

Los abro, y me veo ahora mismo en esa misma pradera, y prácticamente esos paisajes de las Four Corners siguen igual. Y si avanzo hacia el Este, los campos de cereales que pisó Dorothy para alcanzar la Tierra de Oz siguen intactos. Prácticamente, sí. Y el Mississipi sigue siendo igual de ancho como cuando Tom Sawyer y Huckleberry Finn corrieron aquellas aventuras tan inolvidables (aún me estremezco con la escena de la cueva y el indio,uf)

Hay algo de hechizante en todo ello. Cuando somos pequeños nos quedamos pegados a la tele viendo las películas del Oeste. Tal vez a los niños sólo les llame la atención la lucha entre indios y vaqueros, pero puede que a algunos de ellos -digo yo que habrá niños pacifistas :P-, lo que realmente guste sea esa riqueza paisajística.

Y a los mayores a los que nos siguen gustando esas pelis quizás nos atraigan los mismos paisajes -servidora- y esa juventud. No sé si entrecomillar o no esta palabra, pero es para mí la que mejor lo define: juventud. Con su mención se "perdona" la torpeza y se valora el entusiasmo.

Y no pararía, no pararía. Y me parece que ese espíritu joven es el que hace a muchos estadounidenses -sí, sin pudor, dije a muchos estadounidenses- ser más abiertos de mente que lo que muchos europeos- presumimos ser. Luego nos rasgamos las vestiduras porque ellos nos quieren inculcar su "incultura", cuando somos nosotros mismos los que la tomamos, ensimismados por el estilo de vida que nos vende su Cine. Y criticamos, despreciamos el conjunto del Cine de ese país aún siendo los primeros que nos lo tragamos entero, sin apenas pestañear, sólo porque viene de allí.

¿Qué culpa tienen ellos? ¿qué culpa tienen la Coca-Cola, las tortitas, el sirope, las hamburguesas, los batidos y los cines de verano? ¿culpa de habernos gustado y haber "desplazado"nuestra cultura?

No nos engañemos, nadie nos puso un puñal apuntando a la yugular.

(Mural de Thomas Hart Benton en el Missouri State Museum)

PD: procuro que las canciones tengan letras acordes con los temas. En este caso no es así, obviamente, ejem, aunque cuando escuché esta estremecedora versión de Patti Smith no pude dejar de ponerla... y aparte el título era simplemente perfecto.

5 comentarios:

  1. No, no, no, no, no, no, no! Estremecedora versión??? Me parece un crimen a la versión original de Nirvana!

    Dicho lo cual... Me ha encantado tu descripción, como un cuadro de Edward Hooper. El otro día vi Revolutionariy Road. No me gusta mucho, porque no me gustan las pelis tristes y angustiosas, pero comenté con mi amiga lo bonita que era la estética de la película.
    Y sobre el cine... en fin... como los americanos nos vean a nosotros como salimos en Vicky Cristina Barcelona... también dejamos bastante que desear. :S

    Besos!

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  2. Te hablaré de lo que llamo "mi pasión americana" y quizás al final de tu lectura sientas lo mismo hacia mi texto que lo que siento yo hacia el tuyo.

    Es verdad que nadie nos puso un puñal en el pecho, pero también es cierto que no necesitaron hacerlo. ¿Por qué habrían de imponer su modelo por la fuerza, cuando en realidad no quedaban ya modelos contra los que competir? Les bastaron bonitos anuncios y caras sonrientes... triunfadoras.

    Me estoy refiriendo a un hecho incontestable: El Mundo (y más exactamente Occidente) no se "americanizó" hasta después de la II Guerra Mundial. Fue relativamente fácil, y más si lo vemos desde el punto de vista de la Juventud:

    Los focos de cultura y vanguardia en Europa habían sido Francia, Alemania y Rusia. Tan destrozadas quedaron que se convirtieron en terreno abonado a las influencias del otro lado del mar.

    Tres son para mí las grandes vías de influencia norteamericana en Europa: El cine, la literatura y la música.
    En ese orden, sólo mencionaré unos pocos nombres, y su dimensión se verá por sí misma. John Ford, John Wayne, Hemingway, Twain, Chuck Berry y Bob Dylan.

    Entrar a valorar el calado intelectual de sus aportaciones al Arte es absurdo. Para bien o para mal (allá cada cual con sus expectativas) lo "americano" -estadounidense- empapó a las nuevas generaciones europeas por, como te digo, dos razones fundamentales:
    La primera ya te la he dicho, porque no había competencia. Y la segunda es por su mensaje:

    En pocas palabras, Majo: La Redención. Ya anteriormente he hablado de ella como una de las esencias de la cultura popular en Estados Unidos. Hay tanto que decir de un país nacido como respuesta a una ilusión por un Mundo mejor...
    Lo mejor es ver lo sucedido como lo que es, como en una familia:

    En esa familia hay un hermano rebelde. No se somete a la tradición de sus padres, ni a las convenciones de su rancia sociedad. Este hermano es consciente de la inmensidad de posibilidades que le ofrece emanciparse, hacerse a sí mismo con sus propias manos. Abandona su casa, a su familia, su Viejo Mundo, y se lanza a la aventura de construir su Nuevo Mundo dispuesto a pagar el precio.

    Esa ilusión, esa ambición, tanto que hacer, y esa Naturaleza como escenario, frontera, desafío... justo lo que los jóvenes del Viejo Mundo anhelaron en todas las épocas:
    - En los siglos 16 y 17, huyendo de las guerras y persecuciones religiosas.
    - En los siglos 18 y 19, huyendo de las guerras y las hambrunas.
    - En el siglo 20, huyendo de todo lo anterior y de los nazis.

    Y en cuanto a esa tierra, cuyo valor simbólico como Nueva Tierra Prometida tan bien supo representar el Western (no olvidemos que Hollywood es una creación de poderosísimos productores de origen semita), hay algo en nuestra generación que nos seduce aún hoy, pese a saber de sobra que esos paisajes y esas rutas quedaron anegadas por el mercadeo:

    Un horizonte infinito, unas praderas inabarcables con nuestra vista, unos bosques extensos como un país entero... son el símbolo perfecto del santuario que necesita toda ilusión de juventud, toda inocencia que ninguno desea perder.

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  3. Cris: para gustos colores, peeeero yo también me "enamoré" de esos Horses y esa voz quebrada, como tantos otros a los que influyó; y si a esto sumamos mi especial predilección por las voces femeninas y mi querencia por el Punk -desde muy jovencita-, me quedo con esta versión, y con diferencia.

    Aprovecho para poner un enlace para quienes no la conozcan (ahora que tan bien la he vendido), aquí

    Espejo a través: tu comentario ha superado como doscientas veces - ¿o más?- mi entrada. Una verdadera lástima que haya quedado aquí, en el "patio trasero", a la vista de muy pocos :(.
    Y sí, es eso que tan bien dices, lo de la Tierra Prometida y sus constantes interpretaciones por parte de los cineastas.

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  4. Sí la conocía. De hecho, mi mamá tiene algo de ella... pero es que, por buenísima que sea... Nirvana es Nirvana. Siempre.
    Pero me mola tu rollito...
    Besos.

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  5. Oye, que acabo de ver los girasoles majos. Qué precioso. Enhorabuena. Plantéate dejarte el pelo a lo afro.
    Besos!

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